RELATO MES DE ABRIL #ORIGIRETO2019: ¿QUIÉN SOY?

30 de abril de 2019


Despierto de manera abrupta, en una habitación de tantas en las que he estado. Conozco esta sensación, estoy sedado con algún fármaco que sin ninguna duda me administraron ayer por la noche. La luz entra por la diminuta ventana y mi cuerpo empieza a responder dentro de estas cuatro paredes. El reloj marca las ocho con ocho minutos ¿Cómo es que nadie ha venido a buscarme? Aquí, a los dementes nos llaman "pacientes" y no suelen tratarnos con mucha dignidad; no importa quién hayas sido ni lo que hayas hecho de bueno en la vida, dejas de ser alguien, sólo eres un fallo en la cadena, un fluorescente que falla; un ausente por fortuna, para la sociedad.

Suena a resignación, pero lamentablemente la realidad para nosotros que estamos este lugar es así; si te limitas a tomar la medicamentación y no causas muchos problemas, eres casi como un invitado, aunque de invitados los hay de muchas clases. Puedes invitar a un perro callejero a cenar, pero si decides que pase la noche en tu casa, lo llevarás a un cuartucho oscuro, donde no importará lo que rompa, eso si, con la puerta cerrada con llave para que no escape ni se se le oiga ladrar. Es por su propio bien.

Tengo la boca seca, hay un vaso de plástico con agua en la repisa, pero al intentar moverme me doy cuenta que no puedo levantarme de la cama, todavía estoy atado. 

Pasan los minutos y ya estoy despierto por mas de media hora, me lo informa el constante tic tac del reloj. Empiezo a recordar que la noche anterior justo cuando estábamos en el comedor, alguien me atacó y creo que atacaron a más gente, pero todo está borroso en mi mente...

Ya llevo más de tres horas en la cama y me muero de hambre. Intento silbar esa pegajosa canción que repetidamente aparece en los anuncios publicitarios, pero el efecto del sedante es tan fuerte que solo me permite balbucear.

No se porque pruebo liberarme, pues mi instinto es totalmente inútil en estes casos y nunca me ha servido de nada aquí dentro. Aún así, intento llamar la atención golpeando ferozmente el cabecero de hierro que tiene la cama obteniendo un buen resultado, ya que, de manera inmediata comienzo a oír pasos, gente que murmura y a alguien que llora. Una mujer, quizás la enfermera...

Por fin alguien entra, es la enfermera, quien me mira aterrada, tapándose la boca con la mano e inmediatamente colocándose la mascarilla que le cuelga del cuello. El médico, desde una distancia prudente, mira el informe médico y dirige la mirada hacia mi hombro o mi cuello ¿Qué tengo? ¿Acaso estoy herido?

De manera inmediata, le ordena a la enfermera tomarme el pulso y administrarme no se qué medicación, pero ella no se atreve ni a acercarse lo cual me pone muy nervioso y reacciono tambaleándome aunque ni siquiera logro mover la cama. Intento hablar, pero de mi boca ya sólo salen berridos que me obligan a  callar de forma inmediata. Ahora ya estoy asustado; por dentro lloro como un niño, pero de mi boca salen solo sonidos escalofriantes como si estuviera quemándome vivo y gritase de dolor aunque no noto nada.

Empiezo a tener espasmos, que casi consiguen mover la cama, lo que provoca que la enfermera salga a toda prisa de la habitación torciéndose el tobillo y dejando atrás uno de sus zapatos. Cuando abre la puerta veo un gran desorden en el corredor, hay cristales rotos y ensangrentados; creo ver incluso pedazos de algo que no acabo de reconocer.

Me siento raro; comienzo a desatarme con éxito, lo que me sorprende a mí y al doctor quien de manera inmediata prepara otra dosis, tengo que darme prisa. Finalmente consigo liberarme de todas  las correas; el médico en un intento fallido intenta agarrarme, quiero pedirle que por favor me ayude, que no me haga daño pero de repente todo está borroso y cuando me doy cuenta, tiene un gran mordisco en el cuello, está chillando y me apuñala en el pecho con la jeringuilla. Lo empujo contra la pared y el reloj cae al suelo. Miro mis manos; las tengo arrugadas, secas, están demacradas y enrojecidas, al igual que mis desnudos pies ¿Qué esta pasando?


La puerta había quedado entreabierta y me dispongo a salir. Cuando doy el primer paso, me clavo un cristal... no me duele, pero al apoyarlo en el suelo hace que me tuerza al caminar. Se oyeron gritos al final del corredor. Intento comunicarme pero lo único que sale de mi voz son los mismo berridos que oigo a lo lejos. Giro a mi derecha y paso por debajo de unas camillas amontonadas que entorpecen el paso. Los barrotes que incomunican el pasadizo están abiertos, los gritos son cada vez mas cercanos y ensordecedores. La enfermera yace en el suelo, tiene una fractura en la cabeza y sangra mucho. Me acerco a a ella, todo vuelve a estar borroso...

Tengo el hombro irritado; me rasco, me pica mucho. Creo que al hacerlo me he hecho una herida. Sí, es sangre, pero hay demasiada para ser mía. Mis manos están ensangrentadas junto con el pijama. A la izquierda hay unos lavabos del personal. Entro en ellos y enciendo las luces que comienzan a parpadear. Logro ver a unos metros un espejo donde se refleja mi silueta. La fría luz se enciende al fin y logró verme con mayor nitidez. No soy yo, estoy frente al espejo pero no puedo ser yo. Sigo mirando por unos segundos...

Todo se da vueltas a mi alrededor, pese a eso, sigo avanzando tambaleándome, apoyándome en los muros fríos del viejo hospital. Logro llegar a la salida. Estoy muy confundido, pero sigo caminando. Antes de salir, logro verme nuevamente a través del vidrio, pero no soy yo, ¿Qué pasa?; ¿Por qué no logro reconocerme?

Logro escapar y dejar atrás este horrible lugar. Me acerco a un transeúnte para hablarle pero nuevamente todo se vuelve borroso.

Fin

Este relato que acabas de leer está enmarcado en el Reto de escritura Creativa #OrigiReto2019, tiene 1001 palabras y cumple con los siguientes puntos del reto:

  • Objetivo #5: Escribe sobre una fuga.
  • Objetos: #3 Una jeringuilla, #6 Un informe médico.
  • Para medallas: Destino Funesto 3/3. Verborrea interminable 3/3. Interesante 3/3
Pueden consultar las bases o apuntarse a participar en los siguientes enlaces:

Blog de Stiby (Sólo un capítulo más)
Blog de KATTY (La pluma azul de KATTY)

Agradecerles por el tiempo que dedicaron a leer el relato. Cuéntenme en los comentarios que les pareció. Se vienen muchos más!!!, así que sus impresiones son muy valiosas.
Muchos saludos y nos estamos leyendo!!!


11 comentarios:

  1. Qué pasada de relato! Podría extenderme diciéndote las cosas que me gustan, quedarme muy corta diciéndote las que no o... decirte la que me ha matado: eso de que los zombis estén tarareando mentalmente tonadillas de anuncios tendría que ser adoptado YA por la industria cinematográfica.

    Muy buen trabajo <3

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  2. Muy buenas!

    Me ha parecido que has llevado súper bien la intriga de este relato sobre la enfermedad o problema que tiene el protagonista, y mola que al final no quede claro, aunque parece ser algún ser tipo zombi o vampiro al que la sangre le nubla los sentidos. El miedo de la enfermera lo has reflejado genial y esta frase me ha parecido muy buena: "dejas de ser alguien, sólo eres un fallo en la cadena,"

    Por cierto 1001 palabras!!! Apurando el milpalabrista al máximo jaja.

    Un detalle, en esta frase "No se porque pruebo liberarme" sería "no sé (con tilde) por qué (separado y con tilde porque es una pregunta implícita)".

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    1. Por cierto! Me ha sorprendido el objetivo porque pensé que sería el de los zombis e incluso me estaba equivocando con uno del año pasado que era "una historia que suceda en un manicomio" jajajaja cuando he visto que era la fuga me ha gustado todavía más porque es más original!

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  3. Holaaaa Dani!!
    Me ha encantado el punto de vista y el estilo de la narración y hay una explicación al comienzo, sobre que puedes invitar a tu casa a un perro callejero que me ha encantado, no solo la comparación de paciente a perro si no por lo de encerrarte por tu bien", que suena a hipocresía barata y autoconvencimiento mas mas ba todavía. Genial explicado, deja una idea muy clara de la confusión que está sintiendo el personaje protagonista y hace que empatices totalmente con la situación. Me parece genial como objetivo de fuga y tiene pinta de "paciente cero", así que es perfecto xD.

    Cosillas. Esto es algo muy común pero normalmente es fácil de resolver con una revisión fijándote solo en eso, así que te comento el parrafo:

    "La puerta había quedado entreabierta y me dispongo a salir. Cuando doy el primer paso, me clavo un cristal... no me duele, pero al apoyarlo en el suelo hace que me tuerza al caminar. Se oyeron gritos al final del corredor. Intento comunicarme pero lo único que sale de mi voz son los mismo berridos que oigo a lo lejos."

    Si te fijas el cambio de tiempo hace que la lectura quede un poco liosa, no es que sea un fallo terrible, pero si en lugar de "la puerta había" dejas "la puerta está" o "ha quedado" mantienes el tiempo presente y al final, con "se oyeron" sucede igual, mejor se oyen en presente.
    A titulo personal, en ese mismo párrafo tienes un "me tuerzo al caminar" que quizá cambiaría por "ladeo" o "que me hace cojear" mejor que torcer.

    Pero el relato es genial :3 enhorabuena ^^ y ánimo con este mes también!

    .KATTY.
    @MusaJue

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  4. Mucha gracias KATTY querida. De todas maneras voy a corregir lo que me sugieres porque tienes toda la razón
    Abrazos y nos seguimos leyendo

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  5. ¡Hola!
    Me has despistado bien, pensé que sería el reto zombi, pero nooo, cuando veo que era el de una fuga jajaja. Ha estado genial, lectura fácil y te pones en la piel del pobre paciente. Le has dado humanidad mental, pero con un toque aterrador en relación a psicomotricidad, que no es capaz de controlar.

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  6. ¡Qué relato más guay! Me gusta como juegas al despiste, parece que va a ser el relato de zombies y es de zombies, pero también es una huida. Especialmente me gusta que te hayas esquivado las descripciones grotescas, macabras y gores tan habituales en la descripción física de un zombie, la verdad. Me ha gustado mucho como lo has descrito desde la confusión y no desde el asco o el morbo. Y me repito mucho pero es que es como mi parte favorita.

    Gran relato, nos leemos.

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  7. Hola, Daniela! Buen relato. Describes el lado humano de un paciente internado en un hospital psiquiátrico y que suele atacar en forma inconsciente a los demás. Al parecer, él sería un zombi por las características que muestra en la narración. Felicitaciones!

    Rocío Casas

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